La Princesa de Hielo - Cap 07

Capítulo 7.

Cuidad Central lucia esplendida ese día por la mañana. Alguien bajaba de un elegante vehículo, llevaba un vestido de princesa y estaba rodeada de guardias. La mujer camino hacia las oficinas e inmediatamente pidió hablar con el Fuhrer.

- Ya sabes cuáles serán las consecuencias si te opones a mí – sentencio, hablando en privado con el líder militar.

- No conseguirás nada. Nunca encontraras la Piedra Filosofal –

- Estas frustrando la búsqueda de los Elric a propósito, ¿no es así? –

- Mientras yo les diga que lo de la piedra es un mito, no vendrán a Central a pedir información por un tiempo –

- Sin embargo lo hicieron, y como no encontraron al Coronel ni a sus subordinados, tuvieron que retirarse al Este donde están ahora –

- ¿Qué? – el Fuhrer se sorprendió, no sabía nada de esto, su secretaria no le había dicho porque estaba ocupándose de otras labores fuera de la oficina.

- Sabes que estoy vigilando todo movimiento que hay en Central –

La mujer se retiró…

…

- ¿No podemos hacerle nada a esa mujer?, pensé que como homúnculos seriamos invencibles ante los inútiles humanos – se quejó Envy.

- Mientras tenga esas piedras no podemos – comento el Fuhrer – Lo único que queda por hacer es evitar que encuentre la Piedra Filosofal – tomo el teléfono para comunicarse con su aliada…

- Así que esa mujer fue a hablar contigo – comento Lust, enterada de la noticia.

- ¿Cómo van las cosas en el Este? – pregunto él.

- Bien, aun no llegan los Elric como lo comento la princesa –

- Ya veo, debemos separar al equipo de Mustang antes de que lleguen pidiendo información –

Lust colgó el teléfono… estaba algo decepcionada, ‘separar’ no era lo mismo que ‘matar’.

- No debemos permitir que esa mujer sepa sobre la Piedra Filosofal antes que nosotros – murmuro, mirando por la ventana y recordando la cita que había tenido con Havoc, ¿de verdad quería hacerle daño a un hombre como él? Se exalto “¡No! Salir con él solo es parte de la estrategia”.

…

Después del encuentro con aquella mujer misteriosa, que al parecer tenía un poder muy especial en contra de los homúnculos, las cosas marchaban bien en la ciudad del Este; la orden de separar al grupo de Mustang se daría hasta el día siguiente y por lo tanto, algunos debían disfrutar de la noche acompañados de un café…

- ¿Sucede algo? –

Solaris aparto sus pensamientos ante la pregunta de su pareja.

- Últimamente me he sentido cansada –

- Si quieres te llevo a casa – dijo Havoc, de una forma muy caballerosa.

- ¿Y cancelar nuestra cita en este lugar especial? No te preocupes, estaré bien –

- Entonces, cuéntame de ti; ¿a qué te dedicas? –

- Soy diseñadora de modas, aunque en esta ciudad es muy difícil trabajar –

- Ya veo, que interesante –

- Quisiera mudarme a Central, allá hay gente rica que podría solicitar mis servicios y así no tendría de que preocuparme –

- Sería una lástima, así ya no te vería nunca más –

La mujer no sabía que decir, estaba realmente confundida “Separar al grupo de Mustang es la siguiente orden” esta frase pasaba por su mente en esos momentos, Lust debía tomar una decisión… ahora. Una taza de café cayó al suelo, llamando la atención de todos, incluyendo la de Havoc y Solaris.

- Lo siento mucho, soy muy torpe – se disculpó una chica.

- No se preocupe señorita – dijo el mesero, limpiando el área afectada.

- ¿Ah? – Havoc se mostró sorprendido, reconoció a la pareja que recién llegaba al lugar.

- Mira, Havoc está aquí – dijo Fuery, pero al mirar a su acompañante murmuro – Es verdad, está saliendo con alguien –

- Ves, te lo dije. Por eso debíamos venir – agrego Sein en voz baja y luego saludo – Hola, veo que se la están pasando muy bien –

- Y a ustedes es bueno verlos juntos, aunque francamente nunca lo imagine – dijo Havoc, pero luego volvió a su novia – Les presento a Solaris, mi novia –

La mujer saludo educadamente, se veía muy fina.

- Ellos son… -

- Ahh no es necesario dar nuestros nombres – interrumpió Sein.

- Parece que no es un gran momento – comento Fuery.

La joven pareja camino hacia una mesa alejada de ahí, dejando a Havoc completamente confundido ¿Qué era lo que estaba pasando? ¿Por qué esa actitud tan fría hacia su chica?

- Jean… - pronuncio ella - ¿Te mudarías conmigo a Central? – pregunto de repente.

El mencionado quedo más sorprendido de lo que estaba. ¿Mudarse ya? Esta mujer iba demasiado rápido.

En la otra mesa…

- Tienes razón, no me da confianza esa mujer – murmuro el Sargento.

- Es como si fuera de esas mujeres que cazan fortunas. Como Havoc es el Teniente Segundo, gana muy bien. No me sorprendería que quisiera vivir con él –

Aunque las suposiciones de Sein eran falsas, lo único verdadero es que no podían confiar en ella. Siendo un homúnculo, no le daba buena espina a cualquiera.

- Sein, nunca pensé que te preocuparas por las demás personas –

- No es eso… es que… - el comentario la sorprendió y no supo que decir.

- … -

“Va a ser maravilloso conocerte de ahora en adelante” pensó él, a pesar de ser una persona muy optimista y amable, no podía expresar sus sentimientos así de fácil, era incapaz de decirle a ella lo que sentía, incluso ya sabiendo que sería correspondido, su naturaleza de timidez le impedía tales cosas. Sin embargo, su relación con ella ya estaba indicada.

…

Al día siguiente, de vuelta al trabajo; el Coronel Mustang había recibido una orden directa de Central.

- Estoy confiando en ustedes desde que los reclute, porque sé que me apoyaran hasta el final y contra todo. En esta ocasión tenemos que separarnos –

Riza se mostró muy sorprendida ante estas palabras.

- He recibido una orden del Fuhrer y dice que cada uno de ustedes será asignado a diferentes cuarteles –

- ¿Qué? – preguntaron sorprendidos.

- La lista dice: Riza Hawkeye estará en el cuartel del Este, Heymans Breda ira al Oeste, Kain Fuery al Sur, Vato Falman al Norte y, finalmente, Roy Mustang, Jean Havoc y Marceline S. McDougal a Central –

Todos quedaron impactados por esos cambios tan repentinos. Se miraban entre sí, cuestionándose…

- ¿Me voy a quedar aquí? – pregunto Riza, muy decepcionada por separarse del Coronel.

- Eso es muy raro, el Fuhrer debe saber que eres mi subordinada más cercana; pero en esta ocasión tenemos que obedecer – le respondió Roy.

- Pero, ¿solamente los alquimistas se quedan en Central? ¿Junto con Havoc? – pregunto Falman, mirando a los mencionados.

- Tenemos que investigar que está pasando – dijo Roy, decidido.

Entre tanta confusión, el único que parecía alegre era Havoc…

- ¡Que oportuno! Solaris se mudara a Central y yo iré con ella –

- Por lo menos veamos el lado positivo – intervino Breda – Es decir, si algo está pasando, lo único que debemos hacer es investigar y si nos dividen será más fácil, ¿no creen? –

- Por primera vez estoy de acuerdo contigo – anuncio Sein.

- Hasta la pesada está de acuerdo, ¿ya ven? –

- Pero… yo creo que todo esto es muy repentino – comento Fuery, un poco triste – Hace un mes nos trasladaron de Central al Este y ahora… –

“Cada quien tomara su propio camino”

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